03. Educación e Individualización

02. Tratamiento nutricional de la EII
18 de octubre de 2016
04. Dieta por Vía Oral
18 de octubre de 2016

03. Educación e Individualización

Las creencias alimentarias de los pacientes con EII pueden alterar significativamente su ingesta sobre todo en determinados nutrientes como el Calcio y el Hierro.

Las recomendaciones dietéticas deben individualizarse en función del tipo de sintomatología y del segmento afectado.

Se ha comprobado que los alimentos no son la causa de la enfermedad, sino que ciertos alimentos irritantes pueden ser un factor desencadenante o agravante de las crisis, simplemente. Esto significa que no hay que tener miedo a la comida, sólo hay que estar más atentos a los alimentos que se ingieren en momentos de actividad de la enfermedad.

El factor estrés, es un factor agravante, más importante incluso que la comida. De modo que comer de prisa sin descansar, puede ser peor que las posibles transgresiones dietéticas en sí mismas.

Cuando algún alimento haya causado un malestar, se recomiendo quitarlo de la dieta por unos días pero no excluirlo definitivamente. Por el contrario, al cabo de un tiempo, se puede volver a incluirlo en pequeñas raciones. Si luego de intentar en al menos 3 ocasiones (espaciadas y en período de remisión) el malestar se sigue identificando en relación a su ingesta, recién en ese momento se podrá evaluar quitarlo por completo de la dieta. Esta decisión se recomienda realizarla con el consejo de un profesional de la nutrición.